Los profetas de Israel (XXVI) – Isaías (12)
Porque YHVH tendrá piedad de Jacob, y todavía escogerá a Israel, y lo hará reposar en su tierra; y a ellos se unirán extranjeros, y se juntarán a la familia de Jacob… y cautivarán a los que los cautivaron, y señorearán sobre los que los oprimieron (Isaías 14:1,2)
En los capítulos 13 al 24 del libro de Isaías nos encontramos con el juicio a las naciones. El profeta, que anteriormente ha emitido los juicios de Dios sobre Judá e Israel, a la vez que ha desgranado algunos mensajes consoladores acerca del reino mesiánico en Sion, ahora va a centrar su mirada en los pueblos del entorno de Judá. Todas ellas son hoy naciones islámicas.
Comienza con Babilonia, continua con Asiria, Filistea, Moab, Damasco, Etiopía, Egipto, el desierto del mar (es Babilonia, quizá la zona adyacente al Golfo Pérsico, además de Elam, que es Persia, y Media) Duma (Edom), Arabia, el valle de la visión, y Tiro, para terminar en el capítulo 24 con el juicio del Señor sobre toda la tierra.
Está señalado un día para juzgar a todas las naciones, aunque ya han sido juzgadas muchas de ellas en la antigüedad, es el caso de los imperios pasados: Asiria, Babilonia, Grecia y Roma. También lo será el dominio musulmán, como lo fue el nazismo y el comunismo más recientemente.
El profeta Daniel vio una piedra, arrancada sin mano, que golpeó la estatua que representaba a los reinos del mundo, levantándose luego un monte que llenó toda la tierra (Dn.2:34,35). Esa piedra, la raíz de David, el Mesías anunciado, es el Rey de Israel que establecerá su reino sobre toda la tierra.
Las naciones serán juzgadas por su pecado y el antisemitismo irracional sostenido a lo largo de toda la historia. Hoy asistimos a un rebrotar de ese odio hacia los judíos disfrazado de antisionismo o antiisraelismo. El Señor, dice Isaías en nuestro texto, todavía escogerá a Israel (porque nunca lo ha desechado), y lo hará reposar en su tierra. Muchos extranjeros se unirán a ellos y se juntarán a la familia de Jacob.
Vemos aquí a las naciones gentiles que, mediante el evangelio, serán injertadas en los pactos y las promesas hechas a Israel, a través del Mesías; pero también es un mensaje para el fin de los tiempos, cuando el Señor destruya la cubierta, el velo, que cubre a todos los pueblos; lo hará en el monte de Sion (Is.25:7). Como está escrito: diez hombres de las naciones de toda lengua tomarán del manto a un judío, diciendo: iremos con vosotros, porque hemos oído que Dios está con vosotros (Zac.8:23). Cuando YHVH reine en el monte de Sion y en Jerusalén (Is.24:23).
El antisemitismo se tornará en elogios a Israel el día de su restauración; y las naciones serán bendecidas por el Señor desde Sion.