Jesús tuvo plena consciencia de ser el Mesías enviado por el Padre a Israel.
Viniendo Jesús a la región de Cesárea de Filipo, preguntó a sus discípulos, diciendo: ¿Quién dicen los hombres que es el Hijo del Hombre? Ellos dijeron: Unos, Juan el Bautista; otros, Elías; y otros, Jeremías, o alguno de los profetas. El les dijo: Y vosotros, ¿quién decís que soy yo? Respondiendo Simón Pedro, dijo: Tú eres el Cristo, (Mesías), el Hijo del Dios viviente. Entonces le respondió Jesús: Bienaventurado eres, Simón, hijo de Jonás, porque no te lo reveló carne ni sangre, sino mi Padre que está en los cielos. Y yo también te digo, que tú eres Pedro, y sobre esta roca edificaré mi iglesia; y las puertas del Hades no prevalecerán contra ella. Y a ti te daré las llaves del reino de los cielos; y todo lo que atares en la tierra será atado en los cielos; y todo lo que desatares en la tierra será desatado en los cielos. Entonces mandó a sus discípulos que a nadie dijesen que él era Jesús el Cristo (Mateo, 16:16-20).
Hay otros textos que confirman esta aseveración. Veamos una relación:
Jesús lo dijo a la mujer samaritana (Jn.4:25,26).
Los demonios conocían su identidad (Lc.4:41).
Lo confesó abiertamente ante el sumo sacerdote (Mt.26:63,64) (Mr.14:61,62). Lo dijo a sus discípulos explícitamente en el texto que hemos anotado más arriba de Mateo 16, y en Mateo, 23:8-10 relacionó a su Maestro con el Mesías, refiriéndose a sí mismo.
Cuando sus mismos discípulos le reconocían como Mesías no los corrigió (Jn.1:40-42) (Jn.6:68-69).
Sin embargo, Juan el Bautista dijo claramente que él no era el Mesías, sino una voz que anunciaba su venida (Jn.1:19-23). Por tanto, podemos concluir que Jesús, −Yeshúa−, tenía plena consciencia de quién era: el Mesías prometido a Israel.
Veamos una relación de profecías que así lo muestran.
- Nacido de mujer (Gn.3:15) (Gá.4:4)
- Descendiente de Abraham (Gn.22:18) (Gá.3:16)
- Descendiente de Isaac (Gn.21:12) (Lc.3:23,24)
- Descendiente de Jacob/Israel (Nm.24:17) (Lc.3:23,24)
- Nacido de la tribu de Judá (Gn.49:10) (Lc.3:22,23,34)
- Nacido de la familia de Isaí (Is.11:1) (Lc.3:23,32)
- Nacido de la familia de David (Jer.23:5) (Lc.3:23,32)
- Nacido en Belén (Miqueas, 5:2) (Mateo, 2:1)
- Vendría cuando estuviera en pie el Templo (Mal,3:1) (Hag,2:7-9) (Zac, 11:13)
- Le precedería una voz en el desierto (Is.40:3) (Mt.3:1-2)
- Su ministerio comenzaría en Galilea (Is.8:23; 9:1,6) (Mt.4:12,13,17)
- Realizaría milagros (Is.35:5-6) (Mt. 9:35)
- Enseñaría por medio de parábolas (Salmo, 78:2) (Mt. 13:34)
- Entraría en Jerusalén montado en un asno (Zac.9:9) (Lc.19:35-37)
- Sería traicionado por un amigo (Salmo, 41:9) (Mt.10:2,4 y 26:49)
- Vendido por treinta piezas de plata (Zac.11:12,13) (Mt.26:15; 27:5)
- Sería abandonado por sus discípulos (Zac.13:7) (Mr.14:50)
- Sería acusado por falsos testigos (Sal, 35:11) (Mt.26:59-60)
- Permanecería callado ante sus acusadores (Is.53:7) (Mt.27:12)
- Sería herido y golpeado (Is.53:5) (Mt.27:26) (Jn.19:11)
- Sería escupido en la cara (Is.50:6) (Mt.26:67)
- Llevó nuestros dolores y enfermedades, herido por Dios (Is.53:4) (Mr.14:53-65) (1Pedro, 2:23,24)
- Fue objeto de burlas (Sal, 22:7,8) (Mt.27:29)
- Sus manos y sus pies serían horadadas (Sal, 22:16) (Lc.23:33)
- Fue ejecutado con delincuentes (Is.53:12) (Mt.27:38)
- Oraría por sus perseguidores (Is.53:12) (Lc.23:34)
- Sería odiado y aborrecido sin causa (Sal, 69:4) (Jn.15:25)
- Sacudieron la cabeza al verle en la cruz (Sal, 109:25) (Mt.27:39) (Sal, 22:7) (Lc.23:35)
- Repartirían sus vestidos (Sal, 22:18) (Jn, 19:23-24)
- Tuvo sed en la cruz y le dieron a beber hiel y vinagre (Sal, 69:21) (Jn.19:28) (Mt.27:34)
- Se sintió abandonado en la cruz (Sal, 22:1) (Mt.27:46)
- Se encomendó a Dios en la cruz (Sal, 31:5) (Lc.23:46)
- Sus huesos no serían quebrados (Sal, 34:20) (Jn.19:33)
- Sería traspasado su costado (Zac, 12:10) (Jn.19:34)
- En su muerte hubo una gran oscuridad (Amós, 8:9) (Mt.27:45)
- Su muerte tendría un carácter expiatorio (Is.53:10) (Mr, 10:42-45)
- Enterrado en la tumba de un hombre rico (Is.53:9) (Mt.27:57-60)
- Bajaría al lago de fuego (Sal, 18:4-6; 30:5; 69:1-2) (Ef.4:8-10) (Hch.2:23-24)
- La resurrección del Mesías (Sal, 16:10,11) (Hch.2:25-36)
- Se convertiría en piedra de tropiezo (Sal, 118:22) (1Pedro, 2:7)